Pero estemos atentos. Y sabe que si no ejercitas esto, no llegarás a la verdadera caridad ni aprovecharás en ella»[97]. [108] Sta. ¿Eres un trabajador? Y así, mientras nosotros bajamos la guardia, él aprovecha para destruir nuestra vida, nuestras familias y nuestras comunidades, porque «como león rugiente, ronda buscando a quien devorar» (1 P 5,8). Gaudete et Exsultate, Capítulo 1 El Papa Francisco pasa el primer capítulo de Guadete et Exsultate hablando de "El llamado a la Sandad". Por eso exhorto a cada uno a preguntarse y a discernir frente a Dios de qué manera pueden estar manifestándose en su vida. El amor se detiene, contempla el misterio, lo disfruta en silencio»[118]. Porque quienes sienten que no cometen faltas graves contra la Ley de Dios, pueden descuidarse en una especie de atontamiento o adormecimiento. ¿Estás casado? No solo del recuerdo de la Palabra revelada, sino también de la propia vida, de la vida de los demás, de lo que el Señor ha hecho en su Iglesia. Exhortación Apostólica "Gaudete et Exultate". 50. Concédeme un alma que no conozca el aburrimiento, las murmuraciones, los suspiros y los lamentos y no permitas que sufra excesivamente por esa cosa tan dominante que se llama yo. Post not marked as liked 2. postsin. Estamos llamados a cuidar atentamente la caridad: «El que ama ha cumplido el resto de la ley [â¦] por eso la plenitud de la ley es el amor» (Rm 13,8.10). 15. Así compartiremos una felicidad que el mundo no nos podrá quitar. No hay que domesticar el poder del rostro de Cristo»[113]. El santo es capaz de vivir con alegría y sentido del humor. Catecismo de la Iglesia Católica, 2010). La V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, según el magisterio constante de la Iglesia, ha enseñado que el ser humano «es siempre sagrado, desde su concepción, en todas las etapas de su existencia, hasta su muerte natural y después de la muerte», y que su vida debe ser cuidada «desde la concepción, en todas sus etapas, y hasta la muerte natural» (Documento de Aparecida, 29 junio 2007, 388,464). 62. [124] En la tumba de san Ignacio de Loyola se encuentra este sabio epitafio: «Non coerceri a maximo, contineri tamen a minimo divinum est» (Es divino no asustarse por las cosas grandes y a la vez estar atento a lo más pequeño). Del mismo modo, hay muchos matrimonios santos, donde cada uno fue un instrumento de Cristo para la santificación del cónyuge. VI, Decr. PowToon's animation templates help you create animated presentations and animated explainer videos from scratch. Él busca hablarnos en el corazón (cf. 34. postsin. Así se convierte al cristianismo en una especie de ONG, quitándole esa mística luminosa que tan bien vivieron y manifestaron san Francisco de Asís, san Vicente de Paúl, santa Teresa de Calcuta y otros muchos. No eran así los Apóstoles de Cristo. 150. Su opción fue «vivir el momento presente colmándolo de amor»; y el modo como se concretaba esto era: «Aprovecho las ocasiones que se presentan cada día para realizar acciones ordinarias de manera extraordinaria»[16]. Evangelii gaudium (24 noviembre 2013), 40: AAS 105 (2013), 1037. [115] Relatos de un peregrino ruso, Buenos Aires 1990, 25.96. Para ser santos no es necesario ser obispos, sacerdotes, religiosas o religiosos. Si uno asume esta dinámica, entonces no deja anestesiar su conciencia y se abre generosamente al discernimiento. San Pablo invitaba a los romanos a no devolver «a nadie mal por mal» (Rm 12,17), a no querer hacerse justicia «por vuestra cuenta» (v.19), y a no dejarse vencer por el mal, sino a vencer «al mal con el bien» (v.21). Él «huye de la falsedad, se aleja de los pensamientos vacíos» (Sb 1,5). En medio de esta vorágine actual, el Evangelio vuelve a resonar para ofrecernos una vida diferente, más sana y más feliz. «¡Salta de gozo, Sión; alégrate, Jerusalén! A exortação tem foco nos desafios de ser santos no mundo atual, com indicações sobre como viver a santidade - um chamado que é . Porque los mansos, más allá de lo que digan las circunstancias, esperan en el Señor, y los que esperan en el Señor poseerán la tierra y gozarán de inmensa paz (cf. Ella «es la viga maestra que sostiene la vida de la Iglesia»[89]. [116] Cf. Como no encuentran algo grave que reprocharse, no advierten esa tibieza que poco a poco se va apoderando de su vida espiritual y terminan desgastándose y corrompiéndose. El lenguaje que usa el Papa Francisco es sencillo y agradable, animado con muchas ané A partir de tal solidez interior, el testimonio de santidad, en nuestro mundo acelerado, voluble y agresivo, está hecho de paciencia y constancia en el bien. Homilías sobre la carta a los Romanos, IX, 11: PG 60, 470. Por ejemplo, cuando escucho algo de alguien y voy a otro y se lo digo; e incluso hago una segunda versión un poco más amplia y la difundo. Cuando sientas la tentación de enredarte en tu debilidad, levanta los ojos al Crucificado y dile: «Señor, yo soy un pobrecillo, pero tú puedes realizar el milagro de hacerme un poco mejor». CAPÍTULO PRIMERO EL LLAMADO A LA SANTIDAD. 128. Como no puedes entender a Cristo sin el reino que él vino a traer, tu propia misión es inseparable de la construcción de ese reino: «Buscad sobre todo el reino de Dios y su justicia» (Mt 6,33). 100. En contra de la tendencia al individualismo consumista que termina aislándonos en la búsqueda del bienestar al margen de los demás, nuestro camino de santificación no puede dejar de identificarnos con aquel deseo de Jesús: «Que todos sean uno, como tú Padre en mí y yo en ti» (Jn 17,21). 153. Evangelii nuntiandi (8 diciembre 1975), 80: AAS 68 (1976), 73. Así conoceremos la voluntad agradable y perfecta del Señor (cf. Se manifiesta en muchas actitudes aparentemente distintas: la obsesión por la ley, la fascinación por mostrar conquistas sociales y políticas, la ostentación en el cuidado de la liturgia, de la doctrina y del prestigio de la Iglesia, la vanagloria ligada a la gestión de asuntos prácticos, el embeleso por las dinámicas de autoayuda y de realización autorreferencial. Es mejor ser siempre mansos, y se cumplirán nuestros mayores anhelos: los mansos «poseerán la tierra», es decir, verán cumplidas en sus vidas las promesas de Dios. Capítulo segundo: El gnosticismo actual. En una sociedad así, alienada, atrapada en una trama política, mediática, económica, cultural e incluso religiosa que impide un auténtico desarrollo humano y social, se vuelve difícil vivir las bienaventuranzas, llegando incluso a ser algo mal visto, sospechado, ridiculizado. Para un cristiano no es posible pensar en la propia misión en la tierra sin concebirla como un camino de santidad, porque «esta es la voluntad de Dios: vuestra santificación» (1 Ts 4,3). [94] Cristo en los pobres, Madrid 1981, 37-38. Podemos mencionar a santa Hildegarda de Bingen, santa Brígida, santa Catalina de Siena, santa Teresa de Ávila o santa Teresa de Lisieux. Audacia, entusiasmo, hablar con libertad, fervor apostólico, todo eso se incluye en el vocablo parresía, palabra con la que la Biblia expresa también la libertad de una existencia que está abierta, porque se encuentra disponible para Dios y para los demás (cf. La defensa del inocente que no ha nacido, por ejemplo, debe ser clara, firme y apasionada, porque allí está en juego la dignidad de la vida humana, siempre sagrada, y lo exige el amor a cada persona más allá de su desarrollo. S. Bernardo, Sermones sobre el Cantar de los Cantares 61, 3-5: PL 183, 1071-1073. Bez rejestrowania się i instalowania czegoś. [47] Cf. 95. Quizá su vida no fue siempre perfecta, pero aun en medio de imperfecciones y caídas siguieron adelante y agradaron al Señor. Por lo tanto, no te santificarás sin entregarte en cuerpo y alma para dar lo mejor de ti en ese empeño. «Os he hablado de esto para que mi alegría esté en vosotros, y vuestra alegría llegue a plenitud» (Jn 15,11). El consumismo hedonista puede jugarnos una mala pasada, porque en la obsesión por pasarla bien terminamos excesivamente concentrados en nosotros mismos, en nuestros derechos y en esa desesperación por tener tiempo libre para disfrutar. [106] Confesiones, IX, 10, 23-25: PL 32, 773-775. Sin duda, dos: El Señor y el prójimo. Evangelii gaudium (24 noviembre 2013), 218: AAS 105 (2013), 1110. En algún momento tendremos que percibir de frente la propia verdad, para dejarla invadir por el Señor, y no siempre se logra esto si uno «no se ve al borde del abismo de la tentación más agobiante, si no siente el vértigo del precipicio del más desesperado abandono, si no se encuentra absolutamente solo, en la cima de la soledad más radical»[28]. El pequeño detalle de la viuda que ofreció sus dos moneditas. Finalmente, aunque parezca obvio, recordemos que la santidad está hecha de una apertura habitual a la trascendencia, que se expresa en la oración y en la adoración. 3rd party copyright laws. Por la misma razón, en Evangelii gaudium quise concluir con una espiritualidad de la misión, en Laudato siâ con una espiritualidad ecológica y en Amoris laetitia con una espiritualidad de la vida familiar. de iustificatione, sobre la justificación, cap. Normalmente el rico se siente seguro con sus riquezas, y cree que cuando están en riesgo, todo el sentido de su vida en la tierra se desmorona. Catequesis (19 noviembre 2014): LâOsservatore Romano, ed. En ellas se expresa un inmanentismo antropocéntrico disfrazado de verdad católica. 31. Amar así no es fácil porque muchas veces somos tan débiles. Mantener el corazón limpio de todo lo que mancha el amor, esto es santidad. Ga 5,23). El pequeño detalle de que se estaba acabando el vino en una fiesta. Sal 37,9.11). 86. 69. También recordemos el reciente testimonio de los monjes trapenses de Tibhirine (Argelia), que se prepararon juntos para el martirio. Mira tu historia cuando ores y en ella encontrarás tanta misericordia. [67] El orden entre la segunda y la tercera bienaventuranza cambia según las diversas tradiciones textuales. El mundo de las habladurías, hecho por gente que se dedica a criticar y a destruir, no construye la paz. Ecum. Por otra parte, la Iglesia siempre enseñó que solo la caridad hace posible el crecimiento en la vida de la gracia, porque si no tengo caridad, no soy nada (cf. Dios hizo a los humanos equilibrados, pero ellos se buscaron preocupaciones sin cuento» (Qo 7,14.29). Summa Theologiae II-II, q.30, a.4. También los cristianos pueden formar parte de redes de violencia verbal a través de internet y de los diversos foros o espacios de intercambio digital. Sal 139,7). Él nos quiere santos y no espera que nos conformemos con una existencia mediocre, aguada, licuada. No obstante, para que esto sea posible, también son necesarios algunos momentos solo para Dios, en soledad con él. Ya no era la inteligencia lo que ocupaba el lugar del misterio y de la gracia, sino la voluntad. Así como lamenta «la falta de alegría y de esperanza», exalta la «dulce y confortadora alegría de evangelizar» que está unida a «un ímpetu interior que nadie ni nada sea capaz de extinguir», para que el mundo no reciba el Evangelio «a través de evangelizadores tristes y desalentados». Luego vive un momento de angustia, pero recuerda el amor de la Virgen María, toma el rosario y reza con fe. Sin embargo, la corriente vivificante de la vida mística permanece invisible. La santidad que Dios regala a su Iglesia viene a través de la humillación de su Hijo, ése es el camino. 6. 64. El Catecismo nos recuerda que esta ley se debe aplicar «en todos los casos»[71], de manera especial cuando alguien «se ve a veces enfrentado con situaciones que hacen el juicio moral menos seguro, y la decisión difícil»[72]. El texto de Mateo 25,35-36 «no es una simple invitación a la caridad: es una página de cristología, que ilumina el misterio de Cristo»[80]. Se trata de ofrecernos a él que nos primerea, de entregarle nuestras capacidades, nuestro empeño, nuestra lucha contra el mal y nuestra creatividad, para que su don gratuito crezca y se desarrolle en nosotros: «Os exhorto, pues, hermanos, por la misericordia de Dios, a que presentéis vuestros cuerpos como sacrificio vivo, santo, agradable a Dios» (Rm 12,1). Es posible navegar en dos o tres pantallas simultáneamente e interactuar al mismo tiempo en diferentes escenarios virtuales. Capítulo segundo: El gnosticismo actual. Ga 5,22-23). Ese es otro paso. Cada santo es una misión; es un proyecto del Padre para reflejar y encarnar, en un momento determinado de la historia, un aspecto del Evangelio. Esto se refleja en santa Josefina Bakhita, quien fue «secuestrada y vendida como esclava a la tierna edad de siete . ap. Después de su resurrección, donde llegaban los discípulos había una gran alegría (cf. Todo lo contrario, porque llegarás a ser lo que el Padre pensó cuando te creó y serás fiel a tu propio ser. 66. Por lo tanto, «la santidad se mide por la estatura que Cristo alcanza en nosotros, por el grado como, con la fuerza del Espíritu Santo, modelamos toda nuestra vida según la suya»[25]. 142. En la vida del pueblo fiel de Dios encontramos mucha súplica llena de ternura creyente y de profunda confianza. Esto es parte del misterio que las mentalidades gnósticas terminan rechazando, porque no lo pueden controlar. El gnosticismo es una de las peores ideologías, ya que, al mismo tiempo que exalta indebidamente el conocimiento o una determinada experiencia, considera que su propia visión de la realidad es la perfección. No existe identidad plena sin pertenencia a un pueblo. Pero esta mujer dice en su interior: «No, no hablaré mal de nadie». 126. [118] V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, Documento de Aparecida (29 junio 2007), 259. 23. La gracia, precisamente porque supone nuestra naturaleza, no nos hace superhombres de golpe. The Catechism in a Year (with Fr. 135. La persona que ve las cosas como son realmente, se deja traspasar por el dolor y llora en su corazón, es capaz de tocar las profundidades de la vida y de ser auténticamente feliz[70]. Tal vez sea así, pero dejemos que los demás piensen esto. Sin la sabiduría del discernimiento podemos convertirnos fácilmente en marionetas a merced de las tendencias del momento. ¿O acaso puede entenderse la santidad al margen de este reconocimiento vivo de la dignidad de todo ser humano?[82]. 169. Pensemos, como nos sugiere santa Teresa Benedicta de la Cruz, que a través de muchos de ellos se construye la verdadera historia: «En la noche más oscura surgen los más grandes profetas y los santos. Esto es muy diferente de la nobleza de quien se acerca a conversar cara a cara, con serena sinceridad, pensando en el bien del otro. Son pocas palabras, sencillas, pero prácticas y válidas para todos, porque el cristianismo es principalmente para ser practicado, y si es también objeto de reflexión, eso solo es válido cuando nos ayuda a vivir el Evangelio en la vida cotidiana. Evangelii gaudium (24 noviembre 2013), 94: AAS 105 (2013), 1060. Sin embargo, a veces tenemos la tentación de relegar la entrega pastoral o el compromiso en el mundo a un lugar secundario, como si fueran «distracciones» en el camino de la santificación y de la paz interior. Conversar con ella nos consuela, nos libera y nos santifica. Ap 3,20). Solo quien está dispuesto a escuchar tiene la libertad para renunciar a su propio punto de vista parcial o insuficiente, a sus costumbres, a sus esquemas. Quiero remarcar una vez más que, si bien la misericordia no excluye la justicia y la verdad, «ante todo tenemos que decir que la misericordia es la plenitud de la justicia y la manifestación más luminosa de la verdad de Dios»[90]. 24. Mt 13,29). El pequeño detalle de que faltaba una oveja. Su presencia está en la primera página de las Escrituras, que acaban con la victoria de Dios sobre el demonio[120]. No todo lo que dice un santo es plenamente fiel al Evangelio, no todo lo que hace es auténtico o perfecto. Ante la contundencia de estos pedidos de Jesús es mi deber rogar a los cristianos que los acepten y reciban con sincera apertura, «sine glossa», es decir, sin comentario, sin elucubraciones y excusas que les quiten fuerza. Evangelii gaudium (24 noviembre 2013), 197: AAS 105 (2013), 1103. La muchedumbre de los santos de Dios me protege, me sostiene y me conduce»[1]. Si tú no eres capaz de soportar y ofrecer algunas humillaciones no eres humilde y no estás en el camino de la santidad. Para todo discípulo es indispensable estar con el Maestro, escucharle, aprender de él, siempre aprender. Capítulo 1: El llamado a la Santidad, La actividad que santifica - Exhortación Apostólica: 'Gaudete et exsultate' Pero estas experiencias no son lo más frecuente, ni lo más importante. Pertenece al corazón y a la identidad misma de la vida cristiana. En este camino, el desarrollo de lo bueno, la maduración espiritual y el crecimiento del amor son el mejor contrapeso ante el mal. El II Sínodo de Orange enseñó con firme autoridad que nada humano puede exigir, merecer o comprar el don de la gracia divina, y que todo lo que pueda cooperar con ella es previamente don de la misma gracia: «Aun el querer ser limpios se hace en nosotros por infusión y operación sobre nosotros del Espíritu Santo»[55]. Por tanto, pido a todos los cristianos que no dejen de hacer cada día, en diálogo con el Señor que nos ama, un sincero «examen de conciencia». Part 2. [105] S. Juan Pablo II, Exhort. [122] S. José Gabriel del Rosario Brochero, Plática de las banderas, en Conferencia Episcopal Argentina, El Cura Brochero. 120. Esto nos invita a vivir con una gozosa gratitud por ese regalo que nunca mereceremos, puesto que «después que uno ya posee la gracia, no puede la gracia ya recibida caer bajo mérito»[59]. No es así. [101] Recomiendo rezar la oración atribuida a santo Tomás Moro: «Concédeme, Señor, una buena digestión, y también algo que digerir. Esto se refleja en santa Josefina Bakhita, quien fue «secuestrada y vendida como esclava a la tierna edad de siete años, sufrió mucho en manos de amos crueles. 31 views 1 comment. Por eso nadie se salva solo, como individuo aislado, sino que Dios nos atrae tomando en cuenta la compleja trama de relaciones interpersonales que se establecen en la comunidad humana: Dios quiso entrar en una dinámica popular, en la dinámica de un pueblo. 17. Seguramente, los acontecimientos decisivos de la historia del mundo fueron esencialmente influenciados por almas sobre las cuales nada dicen los libros de historia. [113] Discurso en el V Congreso de la Iglesia italiana, Florencia (10 noviembre 2015): AAS 107 (2015), 1284. Era una compasión que lo movía a salir de sí con fuerza para anunciar, para enviar en misión, para enviar a sanar y a liberar. En el capítulo 25 del evangelio de Mateo (vv. «Felices los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia». 7. semanal en lengua española (17 abril 2011), p. 11. 102. En ese silencio es posible discernir, a la luz del Espíritu, los caminos de santidad que el Señor nos propone. Lc 6,20), y así nos invita también a una existencia austera y despojada. 1 P 1,16). Como bien nos recordaron los Obispos de India: «La devoción a la Palabra de Dios no es solo una de muchas devociones, hermosa pero algo opcional. 10. En ellas se dibuja el rostro del Maestro, que estamos llamados a transparentar en lo cotidiano de nuestras vidas. No es de esperar aquí un tratado académico o doctrinal sobre la santidad. 159. Capítulo 1: El llamado a la Santidad, Los santos de la puerta de al lado, Exhortación Apostólica: "Gaudete et exsultate". Por lo tanto, no se trata de un invento de un Papa o de un delirio pasajero. [100] Exhort. It is the responsibility of each user to comply with Evangelii gaudium (24 noviembre 2013), 6: AAS 105 (2013), 1221. Exhort. 138. Allí se habla de Abraham, de Sara, de Moisés, de Gedeón y de varios más (cf. Su amistad nos supera infinitamente, no puede ser comprada por nosotros con nuestras obras y solo puede ser un regalo de su iniciativa de amor. Las riquezas no te aseguran nada. Consta de 177 puntos contenidos en alrededor de 40 páginas. No quitemos valor a la oración de petición, que tantas veces nos serena el corazón y nos ayuda a seguir luchando con esperanza. Esto debería entusiasmar y alentar a cada uno para darlo todo, para crecer hacia ese proyecto único e irrepetible que Dios ha querido para él desde toda la eternidad: «Antes de formarte en el vientre, te elegí; antes de que salieras del seno materno, te consagré» (Jr 1,5). Compartir la Palabra y celebrar juntos la Eucaristía nos hace más hermanos y nos va convirtiendo en comunidad santa y misionera. El encuentro con Jesús en las Escrituras nos lleva a la Eucaristía, donde esa misma Palabra alcanza su máxima eficacia, porque es presencia real del que es la Palabra viva. [26] Cf. No se trata de aplicar recetas o de repetir el pasado, ya que las mismas soluciones no son válidas en toda circunstancia y lo que era útil en un contexto puede no serlo en otro. 54. [36] Homilía en la Misa de la Casa Santa Marta (11 noviembre 2016): LâOsservatore Romano (12 noviembre 2016), p. 8. De esa manera, se suele reducir y encorsetar el Evangelio, quitándole su sencillez cautivante y su sal. De otro modo, la santidad será solo palabras. No está en juego solo un bienestar temporal, ni la satisfacción de hacer algo útil, ni siquiera el deseo de tener la conciencia tranquila. Procura ejercitarlo más con los que menos te caen en gracia. Esta santidad a la que el Señor te llama irá creciendo con pequeños gestos. Los «gnósticos» tienen una confusión en este punto, y juzgan a los demás según la capacidad que tengan de comprender la profundidad de determinadas doctrinas. Cuando algunos de ellos se dirigen a los débiles diciéndoles que todo se puede con la gracia de Dios, en el fondo suelen transmitir la idea de que todo se puede con la voluntad humana, como si ella fuera algo puro, perfecto, omnipotente, a lo que se añade la gracia. Sé santo cumpliendo con honradez y competencia tu trabajo al servicio de los hermanos. 8. Pero igualmente sagrada es la vida de los pobres que ya han nacido, que se debaten en la miseria, el abandono, la postergación, la trata de personas, la eutanasia encubierta en los enfermos y ancianos privados de atención, las nuevas formas de esclavitud, y en toda forma de descarte[84]. [...] Por eso, así como la misericordia es amiga de la sabiduría, la avaricia es su enemiga»[44]. Por esta razón los Apóstoles, después de la humillación, «salieron del Sanedrín dichosos de haber sido considerados dignos de padecer por el nombre de Jesús» (Hch 5,41). 51. Mike Schmitz), The Bible in a Year (with Fr. Porque «la misericordia no es solo el obrar del Padre, sino que ella se convierte en el criterio para saber quiénes son realmente sus verdaderos hijos»[88]. Lc 12,16-21). Todo lo contrario, porque llegarás a ser lo que el Padre pensó cuando te creó y serás fiel a tu propio ser. No es fácil construir esta paz evangélica que no excluye a nadie sino que integra también a los que son algo extraños, a las personas difíciles y complicadas, a los que reclaman atención, a los que son diferentes, a quienes están muy golpeados por la vida, a los que tienen otros intereses. PowToon is a free tool that allows you to develop cool animated clips and animated presentations for your website, office meeting, sales pitch, nonprofit fundraiser, product launch, video resume, or anything else you could use an animated explainer video. 87. Eso no tiene nada que ver con el hambre y la sed de justicia que Jesús elogia. Cuando el corazón ama a Dios y al prójimo (cf. [33] Cf. Así encontramos las grandes motivaciones que nos impulsan a vivir a fondo las propias tareas. En definitiva, es el reino del orgullo y de la vanidad, donde cada uno se cree con el derecho de alzarse por encima de los otros. ¡No tiene miedo! 175. 41. Porque a cada uno de nosotros el Señor nos eligió «para que fuésemos santos e irreprochables ante él por el amor» (Ef 1,4). 2c: LâOsservatore Romano (12 julio 2017), p. 8. Si no queremos sumergirnos en una oscura mediocridad no pretendamos una vida cómoda, porque «quien quiera salvar su vida la perderá» (Mt 16,25). Al mismo tiempo, el discernimiento nos lleva a reconocer los medios concretos que el Señor predispone en su misterioso plan de amor, para que no nos quedemos solo en las buenas intenciones. En cambio, si «nos concentramos en nuestras propias necesidades, nos condenamos a vivir con poca alegría»[102]. Para santa Teresa de Lisieux «la caridad perfecta consiste en soportar los defectos de los demás, en no escandalizarse de sus debilidades»[69]. 90. 165. ¿Tienes autoridad? La humillación te lleva a asemejarte a Jesús, es parte ineludible de la imitación de Jesucristo: «Cristo padeció por vosotros, dejándoos un ejemplo para que sigáis sus huellas» (1 P 2,21). Porque «todo en la vida de Jesús es signo de su misterio»[19], «toda la vida de Cristo es Revelación del Padre»[20], «toda la vida de Cristo es misterio de Redención»[21], «toda la vida de Cristo es misterio de Recapitulación»[22], y «todo lo que Cristo vivió hace que podamos vivirlo en él y que él lo viva en nosotros»[23]. La santificación es un camino comunitario, de dos en dos. Ser cristianos es «gozo en el Espíritu Santo» (Rm 14,17), porque «al amor de caridad le sigue necesariamente el gozo, pues todo amante se goza en la unión con el amado [â¦] De ahí que la consecuencia de la caridad sea el gozo»[99]. Esto afecta a grupos, movimientos y comunidades, y es lo que explica por qué tantas veces comienzan con una intensa vida en el Espíritu, pero luego terminan fosilizados... o corruptos. Él transmitió a santa Faustina Kowalska que «la humanidad no encontrará paz hasta que no se dirija con confianza a la misericordia divina»[98]. Orientale lumen (2 mayo 1995), 16: AAS 87 (1995), 762. Comisión de Asuntos Sociales, Carta abierta a los miembros del Parlamento, The Common Good or Exclusion: A Choice for Canadians (1 febrero 2001), 9. Lo que interesa es que cada creyente discierna su propio camino y saque a la luz lo mejor de sí, aquello tan personal que Dios ha puesto en él (cf. Estas desviaciones se expresan de diversas formas, según el propio temperamento y las propias características. 13. La Madre no necesita de muchas palabras, no le hace falta que nos esforcemos demasiado para explicarle lo que nos pasa. Y abríamos la boca de nuestro corazón, ávidos de las corrientes de tu fuente, la fuente de vida que hay en ti [â¦]. 156. II, Const. Lo único que sé es que el Señor la iluminó con los rayos de la verdad, los cuales sobrepasaban de tal modo el brillo tenebroso de las fiestas de la tierra, que no podía creer en mi felicidad»[108]. Estas palabras nos permiten caminar y servir con esa actitud llena de coraje que suscitaba el Espíritu Santo en los Apóstoles y los llevaba a anunciar a Jesucristo. typ. Mt 25,35)? El discernimiento de espíritus nos libera de la rigidez, que no tiene lugar ante el perenne hoy del Resucitado. Por eso Jesús llama felices a los pobres de espíritu, que tienen el corazón pobre, donde puede entrar el Señor con su constante novedad. Muchas veces tenemos la tentación de pensar que la santidad está reservada solo a quienes tienen la posibilidad de tomar distancia de las ocupaciones ordinarias, para dedicar mucho tiempo a la oración. [66] Cf. Deja que la gracia de tu Bautismo fructifique en un camino de santidad. Todos nosotros hemos sido mirados con compasión divina. Quiero que María corone estas reflexiones, porque ella vivió como nadie las bienaventuranzas de Jesús. 56. Dejémonos estimular por los signos de santidad que el Señor nos presenta a través de los más humildes miembros de ese pueblo que «participa también de la función profética de Cristo, difundiendo su testimonio vivo sobre todo con la vida de fe y caridad»[5]. Así sea». Todos, pero especialmente los jóvenes, están expuestos a un zapping constante. Sea que coma, beba, hable con otros, o haga cualquier cosa, siempre ande deseando a Dios y apegando a él su corazón»[110]. Jesús no dice: «Felices los que planean venganza», sino que llama felices a aquellos que perdonan y lo hacen «setenta veces siete» (Mt 18,22). No tengas miedo de dejarte guiar por el Espíritu Santo. Fue incondicional y permaneció fiel. No digo que la humillación sea algo agradable, porque eso sería masoquismo, sino que se trata de un camino para imitar a Jesús y crecer en la unión con él. Así se produce un peligroso dualismo, porque en estas redes se dicen cosas que no serían tolerables en la vida pública, y se busca compensar las propias insatisfacciones descargando con furia los deseos de venganza. dogm. Dios siempre es novedad, que nos empuja a partir una y otra vez y a desplazarnos para ir más allá de lo conocido, hacia las periferias y las fronteras. Cuando hay circunstancias que nos abruman, siempre podemos recurrir al ancla de la súplica, que nos lleva a quedar de nuevo en las manos de Dios y junto a la fuente de la paz: «Nada os preocupe; sino que, en toda ocasión, en la oración y en la súplica, con acción de gracias, vuestras peticiones sean presentadas a Dios. La medida que apliquemos para dar, se nos aplicará en el cielo para recompensarnos. En la hermosa conmemoración ecuménica que él quiso celebrar en el Coliseo, durante el Jubileo del año 2000, sostuvo que los mártires son «una herencia que habla con una voz más fuerte que la de los factores de división»[9]. EXHORTACIÓN APOSTÓLICA GAUDETE ET EXSULTATE DEL SANTO PADREFRANCISCO, SOBRE EL LLAMADO A LA SANTIDAD EN EL MUNDO ACTUAL, Capítulo Primero EL LLAMADO A LA SANTIDAD, Los santos que nos alientan y acompañan [3-5] Los santos de la puerta de al lado [6-9] El Señor llama [10-13] También para ti [14-18] Tu misión en Cristo [19-24] La actividad que santifica [25-31] Más vivos, más humanos [32-34], Capítulo Segundo DOS SUTILES ENEMIGOS DE LA SANTIDAD, Una mente sin Dios y sin carne [37-39] Una doctrina sin misterio [40-42] Los límites de la razón [43-46], Una voluntad sin humildad [49-51] Una enseñanza de la Iglesia muchas veces olvidada [52-56] Los nuevos pelagianos [57-59] El resumen de la Ley [60-62], «Felices los pobres de espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos» [67-70] «Felices los mansos, porque heredarán la tierra» [71-74] «Felices los que lloran, porque ellos serán consolados» [75-76] «Felices los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos quedarán saciados» [77-79] «Felices los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia» [80-82] «Felices los de corazón limpio, porque ellos verán a Dios» [83-86] «Felices los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios» [87-89] «Felices los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos» [90-94], Por fidelidad al Maestro [96-99] Las ideologías que mutilan el corazón del Evangelio [100-103] El culto que más le agrada [104-109], Capítulo Cuarto ALGUNAS NOTAS DE LA SANTIDAD EN EL MUNDO ACTUAL, Aguante, paciencia y mansedumbre [112-121] Alegría y sentido del humor [122-128] Audacia y fervor [129-139] En comunidad [140-146] En oración constante [147-157], Capítulo Quinto COMBATE, VIGILANCIA Y DISCERNIMIENTO, Algo más que un mito [160-161] Despiertos y confiados [162-163] La corrupción espiritual [164-165], Una necesidad imperiosa [167-168]Siempre a la luz del Señor [169] Un don sobrenatural [170-171]Habla, Señor [172-173] La lógica del don y de la cruz [174-177]. Flp 2,6-8; Jn 1,14). Pensemos, por ejemplo, en los siete santos fundadores de la Orden de los Siervos de María, en las siete beatas religiosas del primer monasterio de la Visitación de Madrid, en san Pablo Miki y compañeros mártires en Japón, en san Andrés Kim Taegon y compañeros mártires en Corea, en san Roque González, san Alfonso Rodríguez y compañeros mártires en Sudamérica. Odsłuchaj Capítulo 1: El Llamado A La Santidad, Los Santos Que Nos Alimentan Y Acompañan i seven innych odcinków spośród Exhortación Apostólica: "Gaudete Et Exsultate" za darmo! En definitiva, Cristo «es nuestra paz» (Ef 2,14), vino a «guiar nuestros pasos por el camino de la paz» (Lc 1,79). Vivir o trabajar con otros es sin duda un camino de desarrollo espiritual. 1¿porque se dice que cada sacramento es una fuente de luz? 119. El Espíritu Santo derrama santidad por todas partes, en el santo pueblo fiel de Dios, porque «fue voluntad de Dios el santificar y salvar a los hombres, no aisladamente, sin conexión alguna de unos con otros, sino constituyendo un pueblo, que le confesara en verdad y le sirviera santamente»[3]. O lo relativizan como si hubiera otras cosas más importantes o como si solo interesara una determinada ética o una razón que ellos defienden. Jesús mismo remarca que este camino va a contracorriente hasta el punto de convertirnos en seres que cuestionan a la sociedad con su vida, personas que molestan. Todos estamos llamados a ser santos viviendo con amor y ofreciendo el propio testimonio en las ocupaciones de cada día, allí donde cada uno se encuentra. Jesús mismo festeja nuestras victorias. 70. La medida que usemos para comprender y perdonar se aplicará a nosotros para perdonarnos. De ahí que suela hablarse, por ejemplo, de una espiritualidad del catequista, de una espiritualidad del clero diocesano, de una espiritualidad del trabajo. ap. Cuando escrutamos ante Dios los caminos de la vida, no hay espacios que queden excluidos. Consiste en asociarse a la muerte y resurrección del Señor de una manera única y personal, en morir y resucitar constantemente con él. 76. La contemplación de estos misterios, como proponía san Ignacio de Loyola, nos orienta a hacerlos carne en nuestras opciones y actitudes[18]. Hace falta luchar y estar atentos frente a nuestras propias inclinaciones agresivas y egocéntricas para no permitir que se arraiguen: «Si os indignáis, no lleguéis a pecar; que el sol no se ponga sobre vuestra ira» (Ef 4,26). Todo esto es importante. La comunidad que preserva los pequeños detalles del amor[107], donde los miembros se cuidan unos a otros y constituyen un espacio abierto y evangelizador, es lugar de la presencia del Resucitado que la va santificando según el proyecto del Padre. 113. «Vale más un día en tus atrios que mil en mi casa»(Sal 84,11). Es verdad que hay que abrir la puerta del corazón a Jesucristo, porque él golpea y llama (cf. Por ejemplo: una señora va al mercado a hacer las compras, encuentra a una vecina y comienza a hablar, y vienen las críticas. El Señor lo pide todo, y lo que ofrece es la . La súplica de intercesión tiene un valor particular, porque es un acto de confianza en Dios y al mismo tiempo una expresión de amor al prójimo. Es interesante advertir que en este texto el beato Pablo VI une íntimamente la alegría a la parresía. ap. Por consiguiente, tiene sentido pedirle que ilumine aun los pequeños detalles de tu existencia, que a él no se le escapan. El amor fraterno multiplica nuestra capacidad de gozo, ya que nos vuelve capaces de gozar con el bien de los otros: «Alegraos con los que están alegres» (Rm 12,15). [28] Carlo M. Martini, Las confesiones de Pedro, Estella 1994, 76. El Señor, en la historia de la salvación, ha salvado a un pueblo. La primera de estas grandes notas es estar centrado, firme en torno a Dios que ama y que sostiene. Sin embargo, podría ocurrir que en la misma oración evitemos dejarnos confrontar por la libertad del Espíritu, que actúa como quiere. Las persecuciones no son una realidad del pasado, porque hoy también las sufrimos, sea de manera cruenta, como tantos mártires contemporáneos, o de un modo más sutil, a través de calumnias y falsedades. Depender de él nos libera de las esclavitudes y nos lleva a reconocer nuestra propia dignidad. Hch 5,41; Flp 1,29; Col 1,24; 2 Tm 1,12; 1 P 2,20; 4,14-16; Ap 2,10). La misma pacificación que obra la gracia nos permite mantener una seguridad interior y aguantar, perseverar en el bien «aunque camine por cañadas oscuras» (Sal 23,4) o «si un ejército acampa contra mí» (Sal 27,3). Pero la justicia que propone Jesús no es como la que busca el mundo, tantas veces manchada por intereses mezquinos, manipulada para un lado o para otro. Pr 26,11). Mike Schmitz). Como consecuencia, es la propia misión la que se resiente, es el compromiso el que se debilita, es el servicio generoso y disponible el que comienza a retacearse. Si nos dejamos guiar por el Espíritu más que por nuestros razonamientos, podemos y debemos buscar al Señor en toda vida humana. Capítulo segundo: El gnosticismo actual. the tribe too! 79. Él va siempre más allá de nuestros esquemas y no le teme a las periferias. Dame, Señor, el sentido del humor. Esto puede ocurrir dentro de la Iglesia, tanto en los laicos de las parroquias como en quienes enseñan filosofía o teología en centros de formación. 8: DH 1532. La pasión deforma la realidad concreta del hecho, lo transforma en relato y termina transmitiendo ese relato cargado de subjetividad. ¿Puede ser sano un fervor espiritual que conviva con una acedia en la acción evangelizadora o en el servicio a los otros? 16. 97. Jesús mismo nos lo dijo en la parábola del rico insensato, de ese hombre seguro que, como necio, no pensaba que podría morir ese mismo día (cf. 141. Algo semejante plantea el Antiguo Testamento cuando dice: «No maltratarás ni oprimirás al emigrante, pues emigrantes fuisteis vosotros en la tierra de Egipto» (Ex 22,20). 2 Co 5,14) y podamos decir con san Pablo: «¡Ay de mí si no anuncio el Evangelio!» (1 Co 9,16). La santidad es el rostro más bello de la Iglesia. La memoria de las acciones de Dios está en la base de la experiencia de la alianza entre Dios y su pueblo. Ni siquiera le bastan las sabias normas de la Iglesia. Esto ocurre cuando algunos grupos cristianos dan excesiva importancia al cumplimiento de determinadas normas propias, costumbres o estilos. 53. Saúde universal: para todos, em todos os lugares; Ressurreição: a exaltação da minha pessoa no amor; Um domingo de 50 dias; Mercado, Estado e os economistas; A mãe como um ser de cuidados paliativos; A força do diálogo entre leigos, presbíteros e epí. En este caso, detrás de la ortodoxia, nuestras actitudes pueden no corresponder a lo que afirmamos sobre la necesidad de la gracia, y en los hechos terminamos confiando poco en ella. 4,1-3; 5,17-18). 172. Entre él y nosotros la desigualdad no tiene medida»[58]. En este documento se encuentran las bases doctrinales para la comprensión de la salvación cristiana en relación con las derivas neo-gnósticas y neo-pelagianas actuales. 72. Todos estamos llamados a ser testigos, pero «existen muchas formas existenciales de testimonio»[11]. Estas notas que quiero destacar no son todas las que pueden conformar un modelo de santidad, pero son cinco grandes manifestaciones del amor a Dios y al prójimo que considero de particular importancia, debido a algunos riesgos y límites de la cultura de hoy. Mt 22,36-40), cuando esa es su intención verdadera y no palabras vacías, entonces ese corazón es puro y puede ver a Dios. [49] Cf. El Concilio Vaticano II lo destacó con fuerza: «Todos los fieles, cristianos, de cualquier condición y estado, fortalecidos . También en la vida del pueblo peregrino hay muchos gestos simples de pura adoración, como por ejemplo cuando «la mirada del peregrino se deposita sobre una imagen que simboliza la ternura y la cercanía de Dios. Amoris laetitia (19 marzo 2016), 133: AAS108 (2016), 363. También es lo que sucedía en la vida comunitaria que Jesús llevó con sus discípulos y con el pueblo sencillo. Hch 4,29; 9,28; 28,31; 2Co 3,12; Ef 3,12; Hb 3,6; 10,19). La oración confiada es una reacción del corazón que se abre a Dios frente a frente, donde se hacen callar todos los rumores para escuchar la suave voz del Señor que resuena en el silencio. Gaudete et exsultate. De ese modo la Iglesia, en lugar de estancarse, podrá seguir adelante acogiendo las sorpresas del Señor. En la carta a los Hebreos se mencionan distintos testimonios que nos animan a que «corramos, con constancia, en la carrera que nos toca» (12,1). 121. No me detendré a explicar los medios de santificación que ya conocemos: los distintos métodos de oración, los preciosos sacramentos de la Eucaristía y la Reconciliación, la ofrenda de sacrificios, las diversas formas de devoción, la dirección espiritual, y tantos otros. Recent Posts Precisamente, algunas corrientes gnósticas despreciaron la sencillez tan concreta del Evangelio e intentaron reemplazar al Dios trinitario y encarnado por una Unidad superior donde desaparecía la rica multiplicidad de nuestra historia. Es lo que vivía san Francisco de Asís, capaz de conmoverse de gratitud ante un pedazo de pan duro, o de alabar feliz a Dios solo por la brisa que acariciaba su rostro. 110. Porque si no advertimos nuestra realidad concreta y limitada, tampoco podremos ver los pasos reales y posibles que el Señor nos pide en cada momento, después de habernos capacitado y cautivado con su don. No te desalientes, porque tienes la fuerza del Espíritu Santo para que sea posible, y la santidad, en el fondo, es el fruto del Espíritu Santo en tu vida (cf. [â¦] Y así, no pudiendo nada la naturaleza y poco la industria, ha de darse poco a la inquisición y mucho a la unción; poco a la lengua y muchísimo a la alegría interior; poco a la palabra y a los escritos, y todo al don de Dios, que es el Espíritu Santo; poco o nada a la criatura, todo a la esencia creadora, esto es, al Padre, y al Hijo, y a Espíritu Santo» (Itinerario de la mente a Dios, VII, 4-5). En definitiva, quiere darnos un corazón nuevo (cf. No pensemos solo en los ya beatificados o canonizados. El emigrante que reside entre vosotros será para vosotros como el indígena: lo amarás como a ti mismo, porque emigrantes fuisteis en Egipto» (Lv 19,33-34). A todos los que en la Iglesia tienen la posibilidad de una formación más alta, san Juan Pablo II les advertía de la tentación de desarrollar «un cierto sentimiento de superioridad respecto a los demás fieles»[41]. Porque el consumismo solo empacha el corazón; puede brindar placeres ocasionales y pasajeros, pero no gozo. Me gusta ver la santidad en el pueblo de Dios paciente: a los padres que crían con tanto amor a sus hijos, en esos hombres y mujeres que trabajan para llevar el pan a su casa, en los enfermos, en las religiosas ancianas que siguen sonriendo. Durante el Año Santo de 1975, el mismo Pablo VI dedicó a la alegría la Exhortación Apostólica, Gaudete in Domino (9 mayo 1975): AAS 67 (1975), 289-322. Por eso, la misericordia, que socorre los defectos ajenos, es el sacrificio que más le agrada, ya que causa más de cerca la utilidad del prójimo»[93]. El discernimiento, en definitiva, conduce a la fuente misma de la vida que no muere, es decir, conocer al Padre, el único Dios verdadero, y al que ha enviado: Jesucristo (cf. ap. Dentro del gran marco de la santidad que nos proponen las bienaventuranzas y Mateo 25,31-46, quisiera recoger algunas notas o expresiones espirituales que, a mi juicio, no deben faltar para entender el estilo de vida al que el Señor nos llama. Joseph Malègue, Pierres noires. Esto no implica despreciar los momentos de quietud, soledad y silencio ante Dios. Quien lo quiere todo claro y seguro pretende dominar la trascendencia de Dios. Lumen gentium, sobre la Iglesia, 12. 2 likes. Está en juego el sentido de mi vida ante el Padre que me conoce y me ama, el verdadero para qué de mi existencia que nadie conoce mejor que él. Tú también necesitas concebir la totalidad de tu vida como una misión. Son dos herejías que surgieron en los primeros siglos cristianos, pero que siguen teniendo alarmante actualidad. Se gastan muchas energías por escapar de las circunstancias donde se hace presente el sufrimiento, creyendo que es posible disimular la realidad, donde nunca, nunca, puede faltar la cruz. De hecho, cuando el gran místico san Juan de la Cruz escribía su Cántico Espiritual, prefería evitar reglas fijas para todos y explicaba que sus versos estaban escritos para que cada uno los aproveche «según su modo»[12]. 83. Esto resulta especialmente importante cuando aparece una novedad en la propia vida, y entonces hay que discernir si es el vino nuevo que viene de Dios o es una novedad engañosa del espíritu del mundo o del espíritu del diablo. Analisis del primer capitulo de la enciclica GAUDETE ET EXSULTATE [114] Cf. Por tal razón, en el evangelio de Lucas ya no escuchamos el «sed perfectos» (Mt 5,48) sino «sed misericordiosos como vuestro Padre es misericordioso; no juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados; dad, y se os dará» (6,36-38). Vita consecrata (25 marzo 1996), 42: AAS 88 (1996), 416. 154. Si Dios ha querido entrar en la historia, la oración está tejida de recuerdos. Esta es una de las grandes convicciones definitivamente adquiridas por la Iglesia, y está tan claramente expresada en la Palabra de Dios que queda fuera de toda discusión. [3] Conc. Parte 1. 101. Quien de verdad quiera dar gloria a Dios con su vida, quien realmente anhele santificarse para que su existencia glorifique al Santo, está llamado a obsesionarse, desgastarse y cansarse intentando vivir las obras de misericordia. 65. Él reconocía la tentación de convertir la experiencia cristiana en un conjunto de elucubraciones mentales que terminan alejándonos de la frescura del Evangelio. Lo atestigua el libro del Apocalipsis cuando habla de los mártires que interceden: «Vi debajo del altar las almas de los degollados por causa de la Palabra de Dios y del testimonio que mantenían. 37. Bien nos enseñaron los Obispos de Nueva Zelanda que es posible amar con el amor incondicional del Señor, porque el Resucitado comparte su vida poderosa con nuestras frágiles vidas: «Su amor no tiene límites y una vez dado nunca se echó atrás. Lo que hay que contemplar es el conjunto de su vida, su camino entero de santificación, esa figura que refleja algo de Jesucristo y que resulta cuando uno logra componer el sentido de la totalidad de su persona[26]. Pero ruego que no entendamos el silencio orante como una evasión que niega el mundo que nos rodea. A estos grandes santos ni la oración, ni el amor de Dios, ni la lectura del Evangelio les disminuyeron la pasión o la eficacia de su entrega al prójimo, sino todo lo contrario. En el fondo la santidad es vivir en unión con él los misterios de su vida. Gaudete et Exsultate - Capítulo 1 . Es también una lucha constante contra el diablo, que es el príncipe del mal. ap. Dumas, El Pobre, Buenos Aires 1962, 103. La Palabra tiene en sí el poder para transformar las vidas»[119]. 92. En varias ocasiones la Iglesia ha canonizado a comunidades enteras que vivieron heroicamente el Evangelio o que ofrecieron a Dios la vida de todos sus miembros. Muchas veces, en contra del impulso del Espíritu, la vida de la Iglesia se convierte en una pieza de museo o en una posesión de pocos. En un relato, Jesús nos advirtió acerca de esta tentación engañosa que nos va deslizando hacia la corrupción: menciona una persona liberada del demonio que, pensando que su vida ya estaba limpia, terminó poseída por otros siete espíritus malignos (cf. 177. [59] Sto. Pero precisamente para tratar de amar como Cristo nos amó, Cristo comparte su propia vida resucitada con nosotros. [24] Benedicto XVI, Catequesis (13 abril 2011): LâOsservatore Romano, ed. Jesús dice que habrá felicidad cuando «os calumnien de cualquier modo por mi causa» (Mt 5,11). Así, bajo el impulso de la gracia divina, con muchos gestos vamos construyendo esa figura de santidad que Dios quería, pero no como seres autosuficientes sino «como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios» (1 P 4,10). Entonces escribió esto a san Antonio de Padua: «Me agrada que enseñes sagrada teología a los hermanos con tal que, en el estudio de la misma, no apagues el espíritu de oración y devoción»[43]. En todos los aspectos de la existencia podemos seguir creciendo y entregarle algo más a Dios, aun en aquellos donde experimentamos las dificultades más fuertes. Te presentamos este video corto sobre el capítulo 1 de la Exhortación Apostólica Gaudete et Exsultate del Papa Francisco sobre el llamado a la santidad en el mundo actual. San Basilio Magno remarcaba que el fiel se gloría solo en Dios, porque «reconoce estar privado de la verdadera justicia y que es justificado únicamente mediante la fe en Cristo»[54]. [82] Recordemos la reacción del buen samaritano ante el hombre que unos bandidos dejaron medio muerto al borde del camino (cf. Si nos descuidamos nos seducirán fácilmente las falsas promesas del mal, porque, como decía el santo cura Brochero, «¿qué importa que Lucifer os prometa liberar y aun os arroje al seno de todos sus bienes, si son bienes engañosos, si son bienes envenenados?»[122]. Miremos a Jesús: su compasión entrañable no era algo que lo ensimismara, no era una compasión paralizante, tímida o avergonzada como muchas veces nos sucede a nosotros, sino todo lo contrario. (Resumen) Introducción. Capítulo segundo: El gnosticismo actual. Y agregaba un consejo para tener lejos al demonio: «Gozándote del bien de los otros como de ti mismo, y queriendo que los pongan a ellos delante de ti en todas las cosas, y esto con verdadero corazón. Solamente a partir del don de Dios, libremente acogido y humildemente recibido, podemos cooperar con nuestros esfuerzos para dejarnos transformar más y más[62]. 80. 21. Aunque las palabras de Jesús puedan parecernos poéticas, sin embargo van muy a contracorriente con respecto a lo que es costumbre, a lo que se hace en la sociedad; y, si bien este mensaje de Jesús nos atrae, en realidad el mundo nos lleva hacia otro estilo de vida. 163. Hans U. von Balthasar, âTeología y santidadâ, en Communio 6 (1987), 486-493. No creo en la santidad sin oración, aunque no se trate necesariamente de largos momentos o de sentimientos intensos. 27. Hay que recordar que el discernimiento orante requiere partir de una disposición a escuchar: al Señor, a los demás, a la realidad misma que siempre nos desafía de maneras nuevas. Cuando encuentro a una persona durmiendo a la intemperie, en una noche fría, puedo sentir que ese bulto es un imprevisto que me interrumpe, un delincuente ocioso, un estorbo en mi camino, un aguijón molesto para mi conciencia, un problema que deben resolver los políticos, y quizá hasta una basura que ensucia el espacio público. 93. Las ideologías que mutilan el corazón del Evangelio. 85. Para ser santos no es necesario ser obispos, sacerdotes, religiosas o religiosos. ¿Acaso el Espíritu Santo puede lanzarnos a cumplir una misión y al mismo tiempo pedirnos que escapemos de ella, o que evitemos entregarnos totalmente para preservar la paz interior? 160. En el fondo, es el deseo de Dios que no puede dejar de manifestarse de alguna manera en medio de nuestra vida cotidiana: «Procure ser continuo en la oración, y en medio de los ejercicios corporales no la deje. Y en el centro está la caridad. Basta musitar una y otra vez: «Dios te salve, María⦻. Papa Francisco, santidad, Gaudete et exsultate. Education. Nos moviliza el ejemplo de tantos sacerdotes, religiosas, religiosos y laicos que se dedican a anunciar y a servir con gran fidelidad, muchas veces arriesgando sus vidas y ciertamente a costa de su comodidad. 2 Tm 2,25). Si buscamos esa santidad que agrada a los ojos de Dios, en este texto hallamos precisamente un protocolo sobre el cual seremos juzgados: «Porque tuve hambre y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber, fui forastero y me hospedasteis, estuve desnudo y me vestisteis, enfermo y me visitasteis, en la cárcel y vinisteis a verme» (25,35-36). 30. El objetivo de esta Exhortación Apostólica es renovar el llamado a la santidad que Dios nos hace a cada uno de nosotros. [61] Lucio Gera, âSobre el misterio del pobreâ, en P. Grelot-L. Gera-A. «Alegraos y regocijaos» (Mt 5,12), dice Jesús a los que son perseguidos o humillados por su causa. En orden a evitarlo, es sano recordar frecuentemente que existe una jerarquía de virtudes, que nos invita a buscar lo esencial. 39. Es una seguridad interior, una serenidad esperanzada que brinda una satisfacción espiritual incomprensible para los parámetros mundanos. 158. Alguien podría objetar: «Si yo soy tan manso, pensarán que soy un necio, que soy tonto o débil». Pero me interesa recordar a tantas mujeres desconocidas u olvidadas quienes, cada una a su modo, han sostenido y transformado familias y comunidades con la potencia de su testimonio. «Felices los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos». A veces, por un don del amor del Señor, en medio de esos pequeños detalles se nos regalan consoladoras experiencias de Dios: «Una tarde de invierno estaba yo cumpliendo, como de costumbre, mi dulce tarea [â¦]. El pequeño detalle de tener aceite de repuesto para las lámparas por si el novio se demora. Nos hace falta siempre, para estar dispuestos a reconocer los tiempos de Dios y de su gracia, para no desperdiciar las inspiraciones del Señor, para no dejar pasar su invitación a crecer. 109. Los santos que ya han llegado a la presencia de Dios mantienen con nosotros lazos de amor y comunión. Se trata de no tener límites para lo grande, para lo mejor y más bello, pero al mismo tiempo concentrados en lo pequeño, en la entrega de hoy. No nos conviene olvidarlo. Como no puedes entender a Cristo sin el reino que él vino a traer, tu propia misión es inseparable de la construcción de ese reino: «Buscad sobre todo el reino de Dios y su justicia» (Mt 6,33). Centesimus annus (1 mayo 1991), 41c: AAS 83 (1991), 844-845. [â¦] Volveré a veros, y se alegrará vuestro corazón, y nadie os quitará vuestra alegría» (Jn 16,20.22). Porque en cada hermano, especialmente en el más pequeño, frágil, indefenso y necesitado, está presente la imagen misma de Dios. Al contrario. Capítulo segundo: El gnosticismo actual. «Cada uno por su camino», dice el Concilio. Aun cuando la existencia de alguien haya sido un desastre, aun cuando lo veamos destruido por los vicios o las adicciones, Dios está en su vida. Pero el Señor nos llama para navegar mar adentro y arrojar las redes en aguas más profundas (cf. El santo no gasta sus energías lamentando los errores ajenos, es capaz de hacer silencio ante los defectos de sus hermanos y evita la violencia verbal que arrasa y maltrata, porque no se cree digno de ser duro con los demás, sino que los considera como superiores a uno mismo (cf. La oración, precisamente porque se alimenta del don de Dios que se derrama en nuestra vida, debería ser siempre memoriosa. Evangelii gaudium (24 noviembre 2013), 94: AAS 105 (2013), 1059. Pidamos al Señor la gracia de no vacilar cuando el Espíritu nos reclame que demos un paso adelante, pidamos el valor apostólico de comunicar el Evangelio a los demás y de renunciar a hacer de nuestra vida cristiana un museo de recuerdos. dogm. Ejercicios espirituales, 102-312. En todo caso, hay que mantener un espíritu flexible, y hacer como san Pablo: «Yo he aprendido a bastarme con lo que tengo» (Flp 4,11). [27] Xavier Zubiri, Naturaleza, historia, Dios, Madrid 19993, 427. En definitiva, se trata de una superficialidad vanidosa: mucho movimiento en la superficie de la mente, pero no se mueve ni se conmueve la profundidad del pensamiento. El Concilio Vaticano II lo destacó con fuerza: «Todos los fieles, cristianos, de cualquier condición y estado, fortalecidos con tantos y tan poderosos medios de salvación, son llamados por el Señor, cada uno por su camino, a la perfección de aquella santidad con la que es perfecto el mismo Padre»[10]. 152. Recordemos que cuando el Nuevo Testamento habla de los sufrimientos que hay que soportar por el Evangelio, se refiere precisamente a las persecuciones (cf. Pr 4,23). Y luego Lucas agrega algo que no deberíamos ignorar: «Con la medida con que midiereis se os medirá a vosotros» (6,38). 43. Esta lucha es muy bella, porque nos permite celebrar cada vez que el Señor vence en nuestra vida. En el fondo, como decía León Bloy, en la vida «existe una sola tristeza, la de no ser santos»[32]. 71. Él no hace caer fuego sobre los infieles (cf. De ese modo, nos convoca a compartir la vida de los más necesitados, la vida que llevaron los Apóstoles, y en definitiva a configurarnos con Jesús, que «siendo rico se hizo pobre» (2 Co 8,9). ap. No puedo expresar lo que pasó por mi alma. Aceptar cada día el camino del Evangelio aunque nos traiga problemas, esto es santidad. 133. Ese es otro camino de santidad. [39] Exhort. Dicho con otras palabras: en medio de la tupida selva de preceptos y prescripciones, Jesús abre una brecha que permite distinguir dos rostros, el del Padre y el del hermano. Algunos desisten de luchar por la verdadera justicia, y optan por subirse al carro del vencedor. 127. No es de esperar aquí un tratado sobre la santidad, con tantas definiciones y distinciones que podrían enriquecer este importante tema, o con análisis que podrían hacerse acerca de los medios de santificación. [112] Juan Pablo II, Carta ap. Jn 17,3). postsin. [75] Exhort. No nos entrega dos fórmulas o dos preceptos más. 122. Sé santo amando y ocupándote de tu marido o de tu esposa, como Cristo lo hizo con la Iglesia. Jesús nos enseñó a pedir cotidianamente esa liberación para que su poder no nos domine. Por ello no podemos pretender que nuestro modo de entenderla nos autorice a ejercer una supervisión estricta de la vida de los demás. «Porque toda la ley se cumple en una sola frase, que es: Amarás a tu prójimo como a ti mismo» (Ga 5,14). 166. Se trata de ser artesanos de la paz, porque construir la paz es un arte que requiere serenidad, creatividad, sensibilidad y destreza. Es un instrumento de lucha para seguir mejor al Señor. Si nos acercamos sinceramente al Señor y afinamos el oído, posiblemente escucharemos algunas veces este reproche: «¿No debías tú también tener compasión de tu compañero, como yo tuve compasión de ti?» (Mt 18,33). ¿Dejas que su fuego inflame tu corazón? Lc 10,30-37). Sin ellas no hay humildad ni santidad. By hermanogustavohdf | Updated: June 6, 2018, 12:28 p.m. Te presentamos este video corto sobre el capítulo 1 de la Exhortación Apostólica Gaudete et Exsultate del Papa Francisco sobre el llamado a la santidad en el mundo actual. Somos frágiles, pero portadores de un tesoro que nos hace grandes y que puede hacer más buenos y felices a quienes lo reciban. Cuando los Apóstoles sintieron la tentación de dejarse paralizar por los temores y peligros, se pusieron a orar juntos pidiendo la parresía: «Ahora, Señor, fíjate en sus amenazas y concede a tus siervos predicar tu palabra con toda valentía» (Hch 4,29). [33] Veamos estas dos formas de seguridad doctrinal o disciplinaria que dan lugar «a un elitismo narcisista y autoritario, donde en lugar de evangelizar lo que se hace es analizar y clasificar a los demás, y en lugar de facilitar el acceso a la gracia se gastan las energías en controlar. Aun en medios católicos se pueden perder los límites, se suelen naturalizar la difamación y la calumnia, y parece quedar fuera toda ética y respeto por la fama ajena. De hecho, en la Biblia suele usarse la misma palabra anawin para referirse a los pobres y a los mansos. Dar y perdonar es intentar reproducir en nuestras vidas un pequeño reflejo de la perfección de Dios, que da y perdona sobreabundantemente. [123] Exhort. 148. 11. Se alegraba cuando sus discípulos lograban avanzar en el anuncio del Evangelio, superando la oposición del Maligno, y celebraba: «Estaba viendo a Satanás caer del cielo como un rayo» (Lc 10,18).